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La mayoría de nosotros lavamos la ropa de forma inconsciente por las prisas o la comodidad: metemos la ropa en el tambor, ponemos el detergente en el cargador y pulsamos siempre el mismo botón de inicio.
No es que esté mal hecho porque las lavadoras de hoy en día son mucho más eficientes que las de hace años. Sin embargo, aún tenemos mucho más margen para aprovechar las ventajas que ofrece nuestra lavadora y lograr así ahorrar y reducir en la factura de la luz de este electrodoméstico básico para la vida diaria.
A continuación, te presentamos una serie de fáciles pautas que te ayudarán a conocer cómo usar la lavadora para que consuma menos:
Conoce la eficiencia energética de tu lavadora
¿Qué es eso de A+ o A+++? Antes de comprar una lavadora debemos comprobar su eficiencia energética, que por ley debe estar indicada en todos los electrodomésticos de la Unión Europea en una escala de la A a la D, siendo el A+++ el mayor nivel de eficiencia energética.
Una lavadora con una eficiencia energética de A puede suponer un ahorro de más del 50% sobre la media en electricidad. Hoy en día lo normal es que todas las lavadoras tengan una eficiencia energética de A.
Aún así, es importante comprobar este dato y sobre todo tenerlo en cuenta a la hora de comprar una nueva lavadora, pues no será lo mismo una con A+ que otra con A+++ (cada + representa un 10% más de eficiencia).
Comprueba la capacidad de carga de tu lavadora
A la capacidad de carga le pasa como a la eficiencia energética, depende de la que tengamos gastaremos más o menos. A mayor capacidad de carga se gasta más en agua y electricidad. Da igual que pongas poca ropa porque va a gastar lo mismo. Por eso, debemos adaptar la lavadora al tipo de hogar que tenemos. No será lo mismo comprar una lavadora para un piso de soltero que para una familia numerosa.
Las lavadoras suelen tener entre 7 y 8 kg de capacidad de carga, pero podemos encontrar hasta de 12 kg. Si vivimos en una casa con mucha gente, la capacidad de carga deberá ser mayor, pues poner todo el rato varias lavadoras de capacidad inferior también supone un gasto mayor de luz y agua. Si estamos en una casa con poca gente, comprar lavadoras de gran capacidad será innecesario y sólo supone más gasto en cada colada.
Carga de forma adecuada tu lavadora
Quizá hayas escuchado que es mejor lavar con poca carga porque así la ropa se arruga menos, pero hacer esto supone un gasto innecesario de luz y agua.
Lo ideal es cargar la lavadora de una forma adecuada, no hace falta que la llenes a presión, pero tampoco que hagas cuatro lavadas al día con poca carga porque ni ayuda a tu ropa y solo aumenta el gasto. Además, si tienes que lavar poca ropa por la razón que sea, las lavadoras actuales cuentan con programas de lavado rápido y cortos que disminuyen el consumo de agua y luz un 50%.
Conoce los programas de lavado de tu lavadora y úsalos en función de cantidad de ropa cargada para gastar sólo lo necesario.
Lava con agua fría
Lavar con agua fría también supone un ahorro de electricidad. Si tu colada no tiene manchas difíciles, la mayoría de las manchas y ropa se pueden lavar con un agua a 30 grados. Muchas veces solemos poner el agua muy caliente porque no dejamos llevar por las temperaturas que indican las marcas de ropa, pero esta temperatura no es que sea la adecuada para lavar, sino la máxima que permite la prenda.
Lavar con menos detergente
Otro de los errores que cometemos habitualmente es ser muy generosos echando detergente en nuestra lavadora porque nos dejamos llevar por las cantidades indicadas por las marcas de detergente.
Normalmente se puede lavar con menos cantidad de detergente y así ahorrarás en consumo del mismo, dañarás menos tu ropa y contaminarás menos.
Controlar el centrifugado
El ciclo de centrifugado es de lo que más energía gasta en una lavadora, pero no todas las prendas requieren que centrifuguemos al máximo.
Para la ropa diaria basta con un centrifugado a 700 velocidades. Programa tu centrifugado en función del tipo de tejido que vayas a lavar.
Programa tu lavadora
Mucha gente dispone de tarifas eléctricas por franjas horarias en las que el consumo de luz es más barato en determinadas horas. Una forma de ahorrar es programar tu lavadora para que se ponga en marcha en esta franja de tiempo.
Las lavadoras actuales suelen tener esta posibilidad de programar así que, si tienes una tarifa de este tipo, aprovecha.
Da mantenimiento a tu lavadora
Para prolongar la vida de tu lavadora lo mejor es darle un mantenimiento adecuado. Basta con limpiar de vez en cuando el filtro, el tambor y la goma que lo rodea y los depósitos del detergente y el suavizante.
En definitiva, aquí tienes algunos consejos sobre cómo usar la lavadora para que consuma menos.
Si estás en plena búsqueda de lavadora te recomendamos que tengas en cuenta algunos requisitos como, por ejemplo, que sea de máxima eficiencia energética, programable y/o tenga diferentes ciclos de lavado.